Los Anquilosaurios, también conocidos como Ankylosauria, forman parte de un infraorden de dinosaurios herbívoros tireóforos. Estos gigantes acorazados habitaron nuestro planeta desde el Jurásico inferior hasta el Cretácico superior, hace aproximadamente entre 208 y 65 millones de años, en lo que hoy conocemos como América, Europa, Asia, Australia y la Antártida.
Estos dinosaurios se distinguían por su impresionante armadura corporal y su cola, elementos distintivos que les proporcionaban una defensa formidable contra los depredadores. Eran herbívoros de cuatro patas, con el cuerpo protegido por una robusta coraza de placas óseas y, en algunos casos, espinas. Su potente cola estaba compuesta por dos huesos que se extendían a cada lado de los huesos de la cola.
En términos de tamaño, los anquilosaurios podían alcanzar un peso de hasta 4.500 kilogramos, medir entre 6 y 9 metros de largo y llegar a una altura de casi 2 metros. Aunque se les consideraba dinosaurios pacíficos, cuando se sentían amenazados podían mostrar una ferocidad sorprendente, especialmente cuando utilizaban su gran cola con su mazo caudal.
Tipos de anquilosaurios
Los anquilosaurios pertenecen al infraorden Ankylosauria, que se divide en dos familias principales:
Ankylosauridae
Esta familia incluye al género Ankylosaurus, del cual se conoce una única especie, Ankylosaurus magniventris. Este dinosaurio es uno de los más reconocidos del grupo y habitó en el norte del continente americano durante el período Cretácico de la Era Mesozoica.
Nodosauridae
Esta es otra familia relevante dentro del infraorden Ankylosauria.
Además, existen otros géneros dentro de Ankylosauria que no pertenecen a ninguna de estas dos familias, como Bienosaurus, Scelidosaurus, Minmi, Antarctopelta y Vectipelta.
Cada uno de estos géneros y familias representa un tipo distinto de anquilosaurio, con sus propias características y adaptaciones únicas. Sin embargo, todos comparten las características generales de los anquilosaurios, como ser herbívoros cuadrúpedos con una sólida armadura de placas óseas y, en algunos casos, espinas.
Dieta de los anquilosaurios
Los anquilosaurios eran dinosaurios herbívoros, lo que significa que su dieta se basaba exclusivamente en plantas. Su menú consistía principalmente en hojas, ramas, helechos y otros vegetales disponibles en su hábitat. Algunas fuentes sugieren que también podrían haber consumido frutas carnosas y plantas fibrosas y leñosas.
Debido a su baja estatura, se cree que se alimentaban únicamente de las plantas que estaban a su alcance, realizando un pastoreo bajo. Sus dientes eran pequeños y estaban perfectamente diseñados para cortar hojas. Aunque no tenían la serie de dientes de otros dinosaurios contemporáneos, se ubica a este ejemplar entre los que comían las hojas que se encontraban a su alcance y casi sin masticar.
Además, se cree que su baja velocidad los obligaba a permanecer en un área reducida para encontrar suficiente alimento. Se estima que podían llegar a ingerir hasta 60 kilos de vegetación al día.
Características distintivas de lo anquilosaurios
Los anquilosaurios eran dinosaurios de gran tamaño, con un peso de hasta 4.500 kilogramos, una longitud de entre 6 y 9 metros y una altura de casi 2 metros. Su morfología se caracterizaba por un cuerpo bajo y ancho, con los miembros traseros más largos que los delanteros y una cabeza más ancha que larga, que se asemejaba a un triángulo.
Estos dinosaurios estaban protegidos por una sólida armadura de placas óseas y espinas que cubrían la superficie dorsal de su cuerpo. Cada placa era única y extremadamente fuerte. Además, poseían una poderosa cola con dos huesos en el extremo, que funcionaba como una temible maza. Esta cola también estaba formada por osteodermos que se unían para formar una base.
A pesar de su apariencia intimidante, se considera que los anquilosaurios eran dinosaurios pacíficos. Sin embargo, podían ser realmente feroces cuando se sentían amenazados, especialmente cuando utilizaban su gran cola con su mazo caudal. Se cree que estos dinosaurios eran de hábitos solitarios y solo se unían a individuos de su misma especie durante la época de apareamiento. En cuanto a su reproducción, se cree que eran ovíparos y que la fecundación era interna.
